llueve
hace frío
ha llegado el invierno
recojo a mi amigo
y vamos
a tomar
un café
el bar
vacío
sólo
la camarera
y
una clienta
borracha
o
que aparenta
estarlo
nos sentamos
y pedimos
dos cafés
hablamos
de nuestras cosas
la borracha
nos habla
mientras
baila
ha llegado el invierno
recojo a mi amigo
y vamos
a tomar
un café
el bar
vacío
sólo
la camarera
y
una clienta
borracha
o
que aparenta
estarlo
nos sentamos
y pedimos
dos cafés
hablamos
de nuestras cosas
la borracha
nos habla
mientras
baila
se cree el centro del universo
la ignoramos
le jode que pasemos
de ella
e insiste
así seguimos
hasta que se aproxima
y nos pide
un cigarro
“no fumamos”
“pues que bien”
está jodida porque está sola
se va
despreciándonos
porque no le hacemos
ni caso
ni a ella
ni a su baile
ni a sus palabras
huecas
cruza la calle
se para
en la acera
se va con uno que pasa
“no puedo con ella”
exclama
la camarera
ni a ella
ni a su baile
ni a sus palabras
huecas
cruza la calle
se para
en la acera
se va con uno que pasa
“no puedo con ella”
exclama
la camarera
2 comentarios:
Parece un poema de Bukowski pero si fuera realmente suyo el poeta no tomaría café.
cual bukowski cafeinado
o cual brautigan descafeinado
la certeza de la inmediatez de la realidad
incluso en contra del poeta (y su amigo)
Publicar un comentario